Quiero enseñaos un trabajo muy interesante de Jólan van der Wiel, un joven diseñador holandés. Estos módulos de cemento están hechos utilizando botellas de agua como moldes. Formas orgánicas y simples que varían en cada pieza. De una idea extraordinariamente sencilla se produce una gran cantidad de formas. Funciona rotundamente la rudeza de las botellas reales, su diseño y deformaciones, con el peso y la bella palidez del cemento.
Manipulables, transportables y con diferentes posiciones y usos. Los límites de su versatilidad depende de la imaginación de los usuarios.